⋆˚ʚɞ Traducción / Corrección: Nue
Entonces, Jeremy, lamentando no haber golpeado un poco más a su problemático hermano, empezó a hablar lentamente.
—Parece que mi hermano se casará antes que yo.
Su voz estaba impregnada de tristeza. Ante esto, Nora miró a su amigo con una expresión que apenas contenía la compasión.
—¿Apenas te das cuenta? Cualquiera puede ver que a tu hermano le encanta jugar al león…
—¡Estoy siendo serio!
—Yo también lo soy. ¿De verdad hiciste todo este espectáculo solo para decirme eso?
—¿Cómo que ‘solo para decirme eso’? ¡Es un problema grave! ¡Ese imbécil de Eli está a punto de casarse antes que su hermano mayor, que soy yo!
—Si te molesta tanto, ve y proponle matrimonio a alguien. ¿O no estás listo para eso aún?
—No, no es eso… Uf, ¿no te da curiosidad saber con quién se va a casar?
—¿Por qué debería importarme con quién salgan o se casen ustedes? ¿Qué tiene que ver eso conmigo?
Era una observación totalmente válida, y Jeremy se quedó sin palabras, abriendo y cerrando la boca sin saber qué decir, antes de murmurar vacilante.
—Bueno, eso es cierto, pero… aun así, siendo algo así como su padrastro, debería importarme un poco, ¿no?
Ante esa afirmación descarada, el rostro de Nora se torció de forma desagradable.
—¿Estabas esperando que me importara? A veces me pregunto qué es lo que realmente esperas de mí…
—¡¿Quién dijo que quería que te importara?! ¡No te preocupes por eso, imbécil! ¡Me da igual con quién salga!
—¿Estás jugando a las veinte preguntas conmigo o qué?
La brusca seriedad en su tono hacía obvio que la paciencia de Nora estaba al límite. Cuando sus ojos azules comenzaron a llenarse de un frío resplandor, Jeremy tosió incómodamente y agitó las manos.
—No es eso… es solo que no sé cómo decirlo… ¡Ah, maldita sea! Ni siquiera fui yo quien lo hizo, pero de todos modos…
—¿Acaso Eli se metió en algún problema?
—…Sí.
—¿Qué tipo de problema? Con todo eso del matrimonio, no me digas que fue algo en esa línea…
—¡Jajaja! ¿Cómo lo adivinaste?
El silencio volvió a caer. Mientras el Marqués se esforzaba por ocultar su risa incómoda, el Duque lo observaba en silencio.
—Lo acabo de descubrir también.
—…
—Los gemelos ya lo saben… ejem, pero no hemos dicho nada a Shuri. ¿No lo hice bien?
Los ojos azules de Nora brillaron con desprecio. Jeremy, nuevamente molesto, se quejó.
—¡¿Por qué?!
—¿De verdad crees que Shuri no se dará cuenta de que están escondiendo algo?
—No, no, es que tiene momentos en los que es bastante despistada…
—¿Estás insinuando que mi esposa es tonta?
—No, no es eso… ¡Aaah! De todas formas, todos decidimos mantener la boca cerrada, así que no es eso lo importante. La cuestión es cómo vamos a…
—¿Cómo que cómo vamos a? Dijiste que se van a casar, ¿no? Eso es todo. Hoy en día no es raro casarse después de un embarazo no planeado.
—¡Claro que eso está resuelto! ¡Todos estamos de acuerdo con eso! ¡El problema eres tú, maldito seas!
—¿Y por qué diablos estás lloriqueando y dando vueltas desde hace rato? ¿Qué más te molesta, imbécil?
—¡¿No te da curiosidad saber con quién se va a casar?!
—Ah, ya veo. ¿Te sentías mal porque no te pregunté? Lo siento, ¿con quién se va a casar?
—¡Con la señorita de Heinrich!
Otra vez, el silencio llenó el aire. Esta vez, era un silencio mucho más tenso. El viento invernal sopló entre los dos hombres mientras se miraban en silencio.
Nora fue el primero en hablar. Se cruzó de brazos, observando los ojos verde oscuro de su amigo mientras dejaba escapar una voz baja.
—Así que al final sucedió.
—…
—No es que no lo hubiera anticipado… Pero entonces, ¿a ti no te entusiasma mucho la idea? Supongo que sería ideal que se casara con alguien de una familia respetable, pero ya que se quieren y han llegado tan lejos…
—Espera, espera, ¡espera un segundo!
—¿Qué pasa ahora?
Jeremy se enderezó rápidamente, respirando agitado. Algo dentro de él le causaba una profunda molestia, aunque no estaba seguro de qué era exactamente. Aun así, sentía la necesidad de aclararlo.
—¿No te importa en absoluto?
—¿El qué?
—Que Eli se case con Ohara. ¡Tu familia fue la que destruyó a la familia Heinrich! Quiero decir, somos aliados, pero si mi hermano se casa con una chica de una familia traidora… Tal vez tú o los ancianos de tu familia se opongan…
—Así que, resumiendo todo tu galimatías, ¿estás preocupado de que yo me oponga a este matrimonio?
El silencio volvió a caer.
—…Más o menos.
—¿Y por eso Eli está con la cabeza baja como un cachorrito?
Jeremy asintió.
—Y si me opongo, ¿te vas a lavar las manos y dejarlo así?
—No es eso, pero… sería mejor que todos lo apoyaran, ¿no? El matrimonio debería ser así.
—…
—Entonces, ¿cómo crees que deberíamos decírselo a Shuri?
—¿Por qué me lo preguntas a mí? El que causó el problema debería ser el que lo informe.
—¿Ah, en serio?
—Claro que sí. Que le den un buen golpe en la espalda de mi parte.
Los dos amigos se miraron con sonrisas cómplices, pero luego sus expresiones se volvieron serias, aunque no por haber recordado algo importante, sino por otras razones.
—Maldita sea, y yo dándole vueltas a todo esto…
—¿De verdad me consideras tan raro?
Nora murmuró, con una mano en la frente y una expresión inusualmente cansada. Al verlo, Jeremy finalmente volvió en sí y se apresuró a corregir cualquier malentendido.
—No es que pensáramos mal de ti, pero esto podría ser un asunto delicado…
—¿Entonces creíste que iba a decir que simplemente abandonara a la chica a la que tu hermano dejó embarazada?
—¡No, ¿por qué lo interpretas así?! Sea o no por un embarazo apresurado, si te opones, las cosas se pondrían bastante complicadas, ¿sabes?
—¿Ah, sí? ¿Y qué sería tan complicado? Al fin y al cabo, es un asunto de tu familia, ¿no?
El tono era completamente sarcástico. Jeremy, ahora bajo presión, comenzó a tartamudear cualquier cosa que pudiera decir.
—Bueno, eso… Por supuesto, si te opones… Shuri se encontraría en una posición incómoda… y nosotros también nos sentiríamos mal… Para ser honesto, Eli tampoco parece saber qué hacer si te pones firme… Así que lo que quiero decir es…
Mientras observaba de reojo a Jeremy, el león de Neuschwanstein, tartamudear de manera lastimosa como nadie más lo habría imaginado, la comisura de los labios de Nora se alzó en una sonrisa torcida.
Había algo inquietante en esa sonrisa, lo que hizo que Jeremy tragara saliva sin darse cuenta.
—¿Qué? ¿Por qué te estás riendo…?
—Estaba reflexionando sobre una cuestión fundamental: ¿por qué demonios sigues aquí?
—¿Qué?
—Digo, ¿por qué estás tú quejándote de todo esto? El que causó el problema fue tu hermano. Ya pasó la edad en que podías pasárselo a tu hermano mayor, ¿no crees?
¡Tenía razón! Los ojos verdes de Jeremy se abrieron de par en par, pero poco a poco comenzaron a llenarse de una luz astuta. Al ver esos ojos, los ojos azules de Nora también brillaron de manera igualmente siniestra. Quizá ambos estaban demasiado cargados de cosas reprimidas.
—Sería divertido ver a ese tonto corriendo en círculos.
⊱─━━━━⊱༻●༺⊰━━━━─⊰
—Oye…
—¿Acaso tienes algo que decirme, joven desastre?
—Ah, maldita sea… eh… no, es que necesito hablar contigo a solas…
—¿Hasta cuándo piensas llamarme ‘tú’ en esa forma tan poco educada? Ya deberías estar acostumbrado, pero en lugar de eso, cada vez me molesta más.
Gracias a la traición sin precedentes de Jeremy, quien, por primera vez en su vida, decidió pasarle la responsabilidad a su hermano, Elias se encontró en una situación que nadie en su familia jamás habría imaginado. Comenzó a seguir a Nora por todos lados, intentando iniciar una conversación privada.
—¡Te digo que hables conmigo un momento!
—No quiero.
—¿Q-qué?
—Dije que no quiero. ¿Con qué estupidez piensas molestarme esta vez?
Como era de esperar, no funcionó muy bien.
—¿Desde cuándo Eli se pega tanto a Nora?
—Debe estar pidiéndole dinero. Oh, mamá, este pijama está hecho de fibra de piña, es perfecto para las noches de verano. Y esto de aquí…
Era una tranquila tarde de invierno. En el espacioso salón con la chimenea crepitando, Shuri estaba absorta en la conversación, mostrando los regalos especiales traídos por la hija de la reina de Safavid.
Habiendo escuchado el complot urdido entre su hermano mayor y su padrastro, Leon se sentó tranquilamente junto a Jeremy, mordisqueando galletas de coco mientras luchaba por no reírse a carcajadas al ver la miserable situación de Elias.
—¡No es una tontería! ¡Estamos hablando de tres vidas aquí! ¡Tres vidas!
—No sé por qué haces tanto escándalo, pero si quieres hablar, ¿por qué no lo haces de una manera más respetuosa?
Contra todas las expectativas de sus hermanos, que pensaban que no aguantaría ni diez minutos antes de perder los estribos, Elias mostró una paciencia casi sobrehumana.
No gritó, ni insultó.
—Te llamaré hermano. Solo hablemos un momento.
—Suena un poco tentador, pero aún recuerdo cómo me hiciste perder el sueño la otra noche.
—Ah, maldito rencoroso…
—¿Maldito qué?
—Eh… te estoy pidiendo un favor… solo un poco…
—…
—No te volveré a llamar ‘tú’ de esa manera.
—…
—Tampoco te llamaré ‘idiota’.
—…
—Y no te hablaré de forma informal… señor.
Quizá el hecho de estar formando una familia lo había suavizado. Nora, viendo a Elias en esa actitud humillada, que antes habría sido impensable, finalmente mostró un gesto que indicaba que estaba dispuesto a escucharlo.
De alguna manera, después de un proceso similar al que había pasado Jeremy, este asunto finalmente llegó a su conclusión.
⊱─━━━━⊱༻●༺⊰━━━━─⊰
—¡¿Qué estás diciendo?! ¿¡Embarazo por error?!
—¡Ahhh! No, no fue a propósito… ¡Ahhh! ¡Me duele! ¡Ahhh!
—¡N-nena, cálmate, cálmate! ¡No es bueno para tu salud enojarte!
—¡Sí, sí! ¡Podemos golpearlo más tarde… o bueno, lo golpearé yo! ¡Solo dame permiso!
Así, tras una serie de malentendidos, conspiraciones, golpes en la espalda y un montón de regaños, Elias finalmente pudo resolver el problema que había estado atormentándolo durante un mes: obtener la bendición de toda la familia para su matrimonio, una noticia que se apresuró a compartir con Ohara.
Y no mucho después, Shuri tuvo su primer bebé.
Fue en la víspera de Navidad.
Comments for chapter "147"
MANGA DISCUSSION