⋆˚ʚɞ Traducción / Corrección: Nue

—Por cierto, no puedo creer que alguien intentara hacerle daño a la señorita Thiel… —Ilum frunció el ceño, su rostro arrugado reflejaba una profunda preocupación.

Arcadia de Everard estaba situada en un lugar lejano, lo que hacía que las noticias llegaran con lentitud. Además, estaban tan ocupados con la restauración de Everard y la reconstrucción de Arcadia que no habían recibido ninguna información reciente.

Por eso, tanto Ilum como Karl se enteraban por primera vez de que ‘alguien intentó atacar a Thiel, y se sospecha que esa persona está escondida actualmente en Nesstian’.

Karl dejó los documentos que sostenía en la mano, miró hacia Ilum y preguntó:

—Entonces, ¿ha entrado ya en Everard?

—No, parece que se dirige a otro lugar.

—¿Entró en Arcadia y no vino primero a Everard?

—Todavía hay muchas familias que no ven con buenos ojos la restauración de Everard. Los Nesstian son probablemente una de ellas.

Ilum tenía razón. 

Aunque Karl había alcanzado la mayoría de edad el año pasado, aún no había celebrado su ceremonia de adultez. Esto se debía a que muchas familias no estaban contentas con que los Everard volvieran a gobernar Arcadia.

Una vez que Karl celebrara su ceremonia de adultez y se convirtiera ‘formalmente’ en el jefe de los Everard, nadie más podría desafiar su dominio en Arcadia. Pero por el momento, el boicot de otras familias había impedido la celebración de la ceremonia.

Este hecho llenaba a Karl de vergüenza y humillación, por lo que no disfrutaba hablando de ello.

—No me agrada. ¿Dónde se hospedará Rowen de Nesstian durante el festival? —Karl usaba un tono cortés, algo natural para él, ya que desde pequeño había llamado a Ilum ‘tío Ilum’. 

Ilum le había dicho innumerables veces que no debía usar ese tono formal, que debía dirigirse a él con la altivez que correspondía a su estatus, pero Karl, cuando estaban a solas, seguía hablando como solía hacerlo en su infancia.

Ilum, sin intención de corregirlo, respondió con naturalidad:

—Parece que han alquilado una casa. No es como si pudiera quedarse en una tienda durante el festival. Sin embargo, no hemos preparado alojamiento específico para Rowen de Nesstian…

Ilum pensaba en las propiedades disponibles mientras sus ojos vagaban por la habitación.

Durante el festival, Everard había preparado mansiones y casas adicionales para albergar a los invitados que llegaban a Arcadia. Las propiedades se distribuyeron entre las familias que habían confirmado su participación, pero no habían reservado nada para los Nesstian.

Ilum, pensativo, dijo:

—Bueno, si es necesario, ellos lo pedirán primero.

No era una actitud muy amable.

Desde que escucharon que ‘la persona que intentó atacar a Thiel podría estar escondida en Nesstian’, tanto Ilum como Karl habían desarrollado una actitud hostil hacia los Nesstian. 

Thiel significaba mucho para Arcadia, Ilum y Karl.

Karl, sin mostrar preocupación, agitó la mano como si no le importara en absoluto.

—Que se ocupen ellos. No me importa. En su lugar, refuerza la seguridad cerca de la señorita Thiel durante el festival para que nadie intente hacerle daño de nuevo.

—Cumpliré con tus órdenes.

—Refuerza la seguridad en los alrededores de donde se hospeda la señorita Thiel y asegúrate de que durante el festival el escuadrón de élite de Everard la proteja. Nadie debe poder acercarse a ella.

El escuadrón de élite de Everard, que actualmente custodiaba a Karl, estaba bajo el mando de Ilum. 

En condiciones normales, estos guardias debían proteger al jefe de la familia durante el festival, pero Ilum asintió dócilmente.

El poder especial de Karl Everard estaba relacionado con el agua.

Si lo deseaba, su habilidad le permitía que el agua fluyera con tal rapidez que podría consumir a todos sus enemigos. 

Ilum confiaba plenamente en las habilidades de Karl, por lo que aceptó de buen grado encargarse de la protección de Thiel durante el festival.

—Y asegúrate de que durante su estancia aquí, la señorita Thiel no se sienta incómoda. Haz que las doncellas revisen su habitación con frecuencia y cambia las flores regularmente. Si siempre recibe las mismas flores, se cansará.

—Ah, esas flores… parecen demasiadas, jefe. Si seguimos así, puede que bloqueemos el flujo de agua…

—Flores amarillas que combinen con el color de sus ojos estarían bien. O tal vez unas flores azules que combinen con su vestido.

Karl no prestaba la menor atención a lo que Ilum decía.

Ilum, resignado, decidió abandonar la conversación y obedecer.

La charla entre Ilum y Karl continuó hasta bien entrada la noche. La luna llena iluminaba con su luz brillante Arcadia, que alguna vez fue la ‘tierra donde nunca salía el sol’.

El día del festival se acercaba.

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—Señorita Rowen, ¿a qué se debe su visita? —El sumo sacerdote le ofreció té a Rowen mientras le preguntaba con voz suave.

Rowen miró la taza humeante una vez, y luego al sumo sacerdote.

—Nesstian no puede perderse el festival que celebra el regreso de la luz a Cracion.

No había dado ni un sorbo al té mientras hablaba. 

Aunque su actitud era algo arrogante frente al sumo sacerdote, este no se molestó en corregirla.

—La diosa Lysette estará complacida. Si la señorita Rowen mostrara sus habilidades ese día, sería aún mejor.

Ya habían confirmado su participación Ferdian de Asterian, Clemence de Arne, Olivier de Wolfgang y Karl de Everard, quienes usarían sus poderes durante el festival para marcar el inicio del evento. Si Rowen de Nesstian también participaba, sería una oportunidad única para que los poderes de las cinco familias brillaran juntos.

Al escuchar esto, Rowen sonrió levemente, dibujando una sonrisa en sus labios.

Su expresión reflejaba una mezcla de confianza y, tal vez, algo de burla.

—Sí, he venido para mostrar mi habilidad frente a los habitantes de Cracion y revelar el ‘verdadero’ poder de la diosa Lysette.

Al escuchar las palabras de Rowen, el sumo sacerdote frunció el ceño.

—¿‘Verdadero’ poder? ¿Qué quiere decir, señorita Rowen?

Rowen se quitó los guantes de seda y los colocó sobre la mesa. 

En las puntas de sus dedos, apenas visible, había una leve mancha negra, pero la oscuridad que ya llenaba la habitación lo hacía imperceptible para el sumo sacerdote.

Después de quitarse los guantes, Rowen activó su habilidad.

Pequeños cristales de hielo comenzaron a formarse en la palma de su mano.

—¿…?

El sumo sacerdote entrecerró los ojos, observando cómo Rowen utilizaba su habilidad.

Era la habilidad de ‘congelación’ característica de los Nesstian. 

Pero… esto parece un poco diferente.

El sumo sacerdote había presenciado de cerca a Zender Nesstian utilizando su poder de congelación antes. 

Además, Rowen Nesstian ya había mostrado su habilidad de congelación durante el ‘Luminaria’. 

En ese entonces, las esculturas de hielo que Rowen creó se derritieron rápidamente ante las figuras de fuego creadas por los Asterian. Sin embargo…

—¿…Eh?

De repente, de los cristales de hielo en la mano de Rowen emanó una pequeña luz.

Debido a la oscuridad de la habitación, era claramente visible. Entre los cristales de hielo, se filtraba un rayo de luz.

Rowen frunció el ceño y concentró más energía en su habilidad. Los cristales de hielo en su mano comenzaron a entrechocar, cambiando de forma.

Y entonces…

¡Pah!

Un destello de luz surgió, y los cristales de hielo de Rowen se transformaron en pequeños peces relucientes. 

Eran idénticos a los peces que siempre rodeaban a Thiel cuando ella utilizaba su poder.

El sumo sacerdote abrió los ojos de par en par, incapaz de creer lo que veía.

—¿Q-qué es esto?

—Es la habilidad de la luz —respondió Rowen con seguridad.

El sumo sacerdote, tratando de calmar su asombro, negó con la cabeza.

—Solo puede nacer una persona con el poder de la luz. No puede haber dos soles en este mundo… Además, la habilidad que ha usado parece más cercana a la de congelación que a la de la luz.

—Pero… piense, sumo sacerdote.

Rowen retiró su habilidad y dejó caer su mano. La luz se apagó instantáneamente y la habitación quedó en completa oscuridad. 

Incluso las velas que iluminaban la sala se extinguieron, haciendo que el sumo sacerdote no pudiera ver con claridad el rostro de Rowen.

No podía saber qué expresión tenía en ese momento.

Rowen continuó hablando lentamente.

—Cuando la luz desaparece, la única luz que queda es la que yo poseo, ¿no es así?

—¿Qué… quiere decir con eso?

—Espere al festival. Verá cuál es el ‘verdadero’ poder de la diosa Lysette, el poder que cambiará el mundo…

Rowen soltó una suave risa en la oscuridad. El sumo sacerdote se quedó inmóvil, incapaz de decir nada.

Permaneció petrificado en su lugar hasta que Rowen se marchó.

La taza de té, que anteriormente despedía vapor, ahora estaba completamente fría.