⋆˚ʚɞ Traducción / Corrección: Nue

—Hemos llegado.

El caballero de Asterian abrió la puerta del carruaje e hizo una reverencia.

Ferdian y Rudian bajaron primero del carruaje con naturalidad.

Thiel también intentó seguir a sus hermanos para bajar del carruaje. Pero…

—¡Ah, yo…!

—Debes agarrarte bien, Thiel, no vaya a ser que te caigas.

Karthus, sin dejar que Thiel se bajara de sus rodillas, la tomó en brazos nuevamente y descendió del carruaje con ella.

Ferdian y Rudian, que esperaban para ayudar a Thiel a bajar, fruncieron el ceño al ver la escena.

—¿Piensas seguir llevándola en brazos incluso aquí? —preguntó Ferdian, visiblemente frustrado.

A Thiel no le molestaba estar en los brazos de Karthus, pero no pudo evitar estar ligeramente de acuerdo con Ferdian.

‘¿Cuándo me va a dejar bajar? pensaba Thiel. 

Desde que había salido de su habitación en la mansión de Asterian hasta su llegada al templo, había sido llevada en brazos todo el tiempo.

Desde su habitación hasta la puerta principal había sido llevada por Ferdian, y desde la puerta principal hasta el carruaje, y luego hasta el templo, la había cargado Karthus.

Incluso los bonitos zapatos que Leah le había puesto parecían innecesarios.

Pero Karthus, sin intención de dejar a Thiel en el suelo, la cargaba mientras adelantaba a Rudian y Ferdian con grandes zancadas.

—Sí, planeo seguir llevándola en brazos. No quiero arriesgarme a que los idiotas del templo hagan alguna tontería otra vez.

Karthus acarició suavemente la mejilla de Thiel con su grueso pulgar.

En el templo, era mejor tener a Thiel en brazos. Desde el incidente reciente, los rumores de que había alguien en la familia Asterian con ‘habilidades de luz’ habían llegado hasta el templo.

Seguramente, la razón por la que habían llamado a Thiel hoy era para comprobar si de verdad tenía esas habilidades.

El sumo sacerdote puede detectar habilidades especiales.

Era evidente que la habían traído para que el sumo sacerdote pudiera verla y confirmar si Thiel realmente poseía esas habilidades. Las intenciones del templo eran claras.

Ferdian y Rudian asintieron brevemente con la cabeza, comprendiendo la situación. Thiel también lo entendió.

…No quiero separarme.

¿Qué pasaría si alguien desconocido intentaba llevársela mientras estaba separada de los Asterian?

Imaginando el peor escenario, el rostro de Thiel palideció.

Sin embargo, rápidamente recordó lo que Ferdian le había enseñado cuando estaba con Ian.

( Thiel, si alguien intenta llevarte, tienes que decir ‘No, no quiero’ )

Thiel asintió con determinación, recordando las palabras de Ferdian.

Si alguien intentaba llevársela, definitivamente diría que no.

—No te preocupes, Thiel. Papá está contigo —dijo Karthus, notando su preocupación. 

Se detuvo un momento para acariciar la espalda de Thiel con suavidad.

Lo que temes no va a pasar.

El tono cariñoso de Karthus hizo que Thiel, que había estado con la cabeza enterrada en su pecho, levantara la vista tímidamente.

—Sí.

Karthus esperó a que Thiel se tranquilizara y luego siguió caminando hacia el interior del templo.

Muchos sacerdotes inclinaron la cabeza en señal de respeto al ver a Karthus Celeste Asterian, Ferdian Asterian y Rudian Asterian.

Karthus les devolvió un ligero gesto de asentimiento.

—¿El resultado de la prueba de parentesco?

—Por aquí, por favor. El sumo sacerdote los está esperando.

Al escuchar mencionar al sumo sacerdote, Karthus murmuró para sí mismo: ‘Sabía que sería así’

Ferdian y Rudian también lo entendieron. Mientras tanto, Thiel inclinaba la cabeza, sin saber de qué hablaban.

Los cuatro siguieron al sacerdote que los guió hasta donde el sumo sacerdote los esperaba.

El lugar era una fuente en el centro del templo, donde se realizaban las pruebas de parentesco.

El método consistía en arrojar al agua un cabello del padre y del hijo, y el color de la fuente determinaba si había parentesco o no.

—Señor Karthus.

En ese momento, el sumo sacerdote, que había visto a Karthus, se acercó con una sonrisa amable.

Karthus inclinó la cabeza con cortesía.

Rudian y Ferdian hicieron lo mismo.

—Ha pasado un tiempo, Andras. He estado demasiado ocupado para venir.

—Lamento haberlo hecho venir, pero Su Santidad, el Papa, insistió en que los resultados debían ser verificados en persona.

El sumo sacerdote terminó su disculpa con la mirada fija en Thiel, que estaba en brazos de Karthus.

Los ojos del sumo sacerdote, ocultos bajo sus párpados arrugados, se dirigieron hacia Thiel.

Así que es ella.

Thiel se encogió bajo la mirada penetrante del sumo sacerdote, que se acercó un paso más.

A medida que el rostro arrugado del sumo sacerdote se aproximaba, el cuerpo de Thiel se tensó de nervios.

Tengo miedo…

El sumo sacerdote examinaba a Thiel de arriba abajo, como si fuera un objeto que necesitaba ser inspeccionado meticulosamente, más que un niño.

Al final, Thiel se aferró al cuello de Karthus, inclinando la cabeza.

—H-hola…

En ese momento, el rostro del sumo sacerdote se acercó aún más.

Thiel se preguntó seriamente si debería gritar ‘No quiero’ en ese momento.

—Mi hija es muy tímida. Preferiría evitar trámites innecesarios y pasar directamente a los resultados.

Karthus cubrió a Thiel con su capa, tratando de calmar su evidente nerviosismo.

El sumo sacerdote frunció el ceño brevemente, pero rápidamente borró su expresión y asintió con una risa suave.

—Sí, entonces les mostraré los resultados.

—¿Verlos? Prefiero escucharlos, Rudian.

Karthus pasó a Thiel a Rudian.

Rudian la abrazó con cuidado, acariciándole la cabeza para que pudiera descansar su cara en su hombro.

Ferdian y Rudian estaban a punto de llevarse a Thiel fuera de la fuente cuando…

—No es necesario. Pueden quedarse y ver.

El sumo sacerdote detuvo a Rudian y Ferdian.

Ambos se detuvieron, desconcertados, y en ese momento…

El sumo sacerdote dejó caer los cabellos de Thiel y Karthus en la fuente al mismo tiempo.

—¡¡…!!

La expresión de Karthus, Ferdian y Rudian se endureció al instante por la acción despreocupada del sumo sacerdote.

Por supuesto, aunque todos ellos seguían creyendo firmemente que Thiel era hija de Karthus y Lena, esto no estaba bien. 

Lo que no está bien, simplemente no lo está.

Cuando se verifican los resultados de una prueba de parentesco, nunca se deja que el niño vea los resultados directamente.

Independientemente del resultado, solo esa situación podría causar un gran daño al niño.

Por eso, Karthus también tenía la intención de hacer que Thiel saliera antes de ver los resultados.

Pero así, de esta manera…

—……

Karthus se pasó la mano por la cara. Rudian, de manera instintiva, cubrió los ojos de Thiel, mientras que Ferdian, con el rostro endurecido, fulminaba con la mirada al sumo sacerdote.

El método de prueba de parentesco del templo era más simple de lo que parecía. El Papa o su representante soplaba poder sagrado en la fuente, y luego dejaba caer el cabello del padre y del hijo en el agua.

Si el color de la fuente cambiaba, significaba que había relación de parentesco. Si no cambiaba…

—……

La fuente permaneció inmóvil.

Karthus, Rudian y Ferdian sabían bien lo que eso significaba.

Era una señal de que Thiel no era hija biológica de Karthus.

El templo había evitado que Thiel saliera del lugar para asegurarse de que tanto ella como Karthus vieran el resultado con claridad.

Pero Thiel sí era hija de Karthus. La cámara secreta de la mansión de Asterian lo confirmaba.

Entonces esto no era más que una maniobra del templo. Todo esto se había planeado para conmocionar a la niña y arrebatársela a sus padres.

Ese hecho hizo que la ira de Karthus creciera. No podía contener el enojo.

Karthus alternaba su mirada entre la fuente y el sumo sacerdote, considerando brevemente el costo que Asterian tendría que pagar si volcara el templo.

Pero no tuvo mucho tiempo para pensar, ya que el sumo sacerdote intervino abruptamente.

—Creo que no es necesario explicar el resultado, ya lo habrán entendido.

—……

Karthus se quedó allí inmóvil, mirando fijamente al sumo sacerdote.

Era como si quisiera ver hasta dónde llegaría. Sus ojos dorados brillaban con una intensidad escalofriante.

—En el templo también nos encargamos de cuidar a los niños. Si se determina que no hay relación de parentesco, el niño sin hogar puede quedarse temporalmente aquí.

—Ah, claro.

—Sí, como bien sabrán.

Tan pronto como el sumo sacerdote terminó de hablar, uno de los sacerdotes se acercó rápidamente a Rudian y Thiel.

Rudian fulminó con la mirada al sacerdote y abrazó a Thiel aún más fuerte.

—¿Por qué no te largas de aquí?

Karthus y Ferdian observaron con una sonrisa sarcástica, sabiendo que habían acertado en sus suposiciones. Era evidente que el templo había querido mostrar delante de Thiel que no era hija biológica de Karthus.

Intentaban manipular la culpa para llevársela al templo.

Manipularon los resultados para poder llevársela y luego, bajo el pretexto de la voluntad de Dios, se negarían a devolverla.

Por muy deseable que fuera el poder de la luz, nunca esperaron que llegaran a tanto.

En ese momento, Thiel, que había estado acurrucada en los brazos de Rudian, levantó la cabeza con cautela.

—Ah, eh.

Karthus, Ferdian, Rudian y el sumo sacerdote la miraron.

La niña parpadeó con sus grandes ojos y comenzó a hablar, con la voz temblorosa.

—¿No soy hija del Señor Karthus?

—……

—Qué raro… Eso no puede ser.

La voz de la niña no tenía ni un ápice de duda.

Su voz clara y firme rompió el silencio.

Por un momento, todo quedó en calma.