⋆˚ʚɞ Traducción / Corrección: Nue

—¿Patriarca? Qué tontería…

Zender se burló mientras se sentaba en el sofá, agitando lentamente su taza de té. El aroma del té se extendió suavemente mientras el líquido se movía despacio dentro de la taza.

—Ja, ja… ¿crees que los dejaré escapar tan fácilmente?

Hablaba en voz alta para ser un monólogo. Zender dejó la taza con un golpe sonoro y miró al asiento vacío frente a él.

Aunque no había nadie sentado enfrente, Zender actuaba como si alguien estuviera allí.

Tal vez, una niña de siete años, mucho más pequeña que otras de su edad… su nieta.

Ese viejo zorro ha hecho sus cálculos.

Había escuchado a través de Iker que Thiel e Iandros se habían marcado.

El plan de Zender de enviar a su nieta como la próxima consorte del príncipe heredero había fracasado estrepitosamente, pero no le importaba tanto.

Que Thiel Asterian cayera en manos del Emperador era, sin duda, mucho mejor que permanecer bajo el control de los Asterian.

No podía permitir que los Asterian se volvieran más fuertes.

Prefería que nadie la tuviera, pero como no podía hacer eso, lo mejor era que la tomara la familia imperial por ahora.

¿Convertir a Thiel Asterian, esa niña de siete años, en la patriarca?

Zender se burlaba de Alpheus. Parece que, estando en el puesto de patriarca de los Asterian, ya no ve nada con claridad. Pensar en nombrar a una niña de siete años como líder de la familia.

De todos modos, no podía quedarse de brazos cruzados. Por eso mencionó la leyenda y exigió que demostraran su habilidad diciendo que aceptaría a Thiel como líder de los Asterian si lograba llevar la mañana a la ‘tierra donde nunca llega el amanecer’.

Sin embargo, ni siquiera mientras hablaba pensó que los Asterian aceptarían.

La ‘tierra donde nunca llega el amanecer’ era un área prohibida, un lugar donde ni siquiera los grandes depredadores podían entrar.

Alpheus y Karthus no podrían acompañarla, ni los caballeros de los Asterian, lo que significaba que enviar a Thiel Asterian allí sería exponer a esa niña indefensa al peligro.

Por lo tanto, estaba seguro de que rechazarían su propuesta…

( En ese caso, lo haré. No evito lo que debo hacer. Si es algo que debo hacer, lo haré con todo mi deber. )

Pero esa estúpida niña, Thiel, aceptó de inmediato, dejando a los Asterian en una posición en la que no podían rechazar.

Zender soltó una risita.

¿Es eso lo único que les enseñan en los Asterian, a lanzarse imprudentemente al peligro?

Si se hubiera quedado en Nesstian, no la habrían educado de esa manera.

Le habrían enseñado a dar un paso atrás y mirar más allá. No la habrían criado para ser una niña tan lenta.

Bueno, de todos modos…

Zender se acarició el mentón. La tierra donde nunca llega el amanecer está en el extremo norte del Imperio Cracion.

Llevaría mucho tiempo llegar allí, y el viaje no sería fácil. Thiel tendría que hacerlo sola, sin la ayuda de adultos…

Bueno, no estará completamente sola, ¿verdad?

Probablemente otros niños la acompañarían. Ferdian Asterian, Rudian Asterian, y el príncipe heredero Iandros Cracion irían con ella.

Pero por muy fuertes que fueran, seguían siendo niños de solo once años.

Por mucho que tuvieran grandes habilidades, eran niños que no tenían experiencia real en usar esas habilidades en combate.

Esta es la oportunidad.

Tenía que eliminarla ahora. Zender miró su mano abierta, luego cerró el puño con fuerza.

Si no la eliminaba esta vez, esa niña, Thiel, eventualmente se convertiría en una fiera bestia que hundiría sus colmillos en su cuello…

Ya fuera que cumpliera o no su misión, si regresaba, se quedaría confinada en Asterian, cerca de Alpheus y Karthus. Ahora, mientras estaba separada de ellos, era su única oportunidad.

—… Espera.

Lena, observa.

Voy a deshacerme de ese problema que diste a luz, de una vez por todas…

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—Llévate esto.

Ferdian, de pie con una actitud despectiva, miró fijamente a la sirvienta mientras hablaba. La sirvienta inclinó la cabeza con calma, negándose a retirar el objeto.

Era obvio. Lo que estaba frente a ellos no era un objeto cualquiera, sino Olivier Wolfgang.

—Ferdian~ ¿Eso es lo que le dices a tu prima después de tanto tiempo sin vernos?

—¿Tiempo sin vernos? ¿No volviste a Wolfgang hace menos de una semana? Nosotros ya tenemos que volver a Asterian, ¿qué haces aquí?

—Obviamente, ¡vine para volver a Asterian con ustedes!

Olivier respondió con orgullo, poniendo las manos en su cintura. Sus adorables ojos rosados brillaban.

—¿Por qué querrías hacer eso?

—Porque soy miembro de Asterian, ¿no?

—¿Qué tontería estás diciendo?

Rudian chasqueó la lengua con resignación. Parecía claro que Karthus y Alpheus no lo habían llamado.

—Es una broma. ¡Vine porque tenía curiosidad! Dicen que Thiel se ha marcado con Iandros, ¿es cierto?

—¿Ya se ha difundido ese rumor?

—¡Sí! ¡Todo el mundo lo sabe! ¡Dicen que Thiel Asterian se convertirá pronto en la princesa heredera!

—Alguien tiene la lengua suelta…

No se había hecho un anuncio oficial en el palacio, pero ya se había difundido el rumor. Quienquiera que fuera, tenía una lengua rápida y atrevida. ¿Qué pasaría si la corte decidía rastrear y atraparlo?

Además…

Ni siquiera es algo que se pueda ver a simple vista.

La marca entre Thiel e Iandros era algo que solo unos pocos, incluyéndolos a ellos, sabían. ¿Cómo había llegado a ser un rumor?

Ferdian inclinó la cabeza mientras miraba a Olivier durante un rato y luego se encogió de hombros.

—Sí, es verdad.

—¿En serio? ¿De verdad? ¡Eso no puede ser! ¡Dime que no es cierto!

—Yo también quisiera hacerlo, pero ¿qué puedo hacer si es verdad?

En ese momento, desde lejos, apareció de repente un pequeño leopardo de las nieves bebé.

—¿Thiel?

Olivier, al ver a Thiel, abrió mucho los ojos y sonrió ampliamente.

El leopardo bebé, al ver a la adorable niña de cabello gris y ojos rosados, corrió rápidamente hacia los brazos de Olivier y se acurrucó contra ella.

—¡Kyaaa!

—¡Thiel! ¡Eres tan linda! ¿Por qué te transformaste de repente?

Ante la pregunta de Olivier, el pequeño leopardo pareció pensar por un momento, luego se revolvió y escapó de los brazos de Olivier.

—¿Eh?

Plaf.

Aterrizó suavemente en el suelo, dio una vuelta sobre sí misma, y de repente…

¡Puf!

El leopardo bebé desapareció y en su lugar apareció una adorable niña con cabello blanco y ojos dorados.

—¡Hermana Olivier!

—Thiel, ¡ni siquiera he podido besarte tus suaves patitas rosadas y ya te transformaste de nuevo!

—¡Aaah, lo siento! Pero no puedo hablar cuando estoy transformada… aunque lo estoy practicando…

Thiel sonrió tímidamente y se rascó la mejilla. Últimamente, Thiel estaba practicando cómo usar sus habilidades y hablar mientras estaba transformada.

Ferdian y Rudian habían aprendido a hablar y a usar sus habilidades en forma animal a los cinco años, pero Thiel, siendo un poco más tardía, aún tenía dificultades con ambas cosas.

—¡Oh, Thiel! Todo eso lo harás bien cuando llegue el momento, ¿por qué apresurarte tanto?

Olivier la levantó cariñosamente en brazos mientras le preguntaba. Thiel miró fijamente a los ojos rosados de Olivier y respondió con sinceridad.

—Es que pronto tendré que emprender un largo viaje… ¡mmf!

—¡Ja, ja! ¿Qué estás diciendo? Thiel, solo lo estás aprendiendo porque es útil, ¿verdad?

Ferdian, que se había acercado rápidamente, le tapó la boca a Thiel con una mano mientras la consolaba, dándole palmaditas en la espalda.

—¿Un largo viaje? ¿Por qué dirías algo así? Hermana, no tienes ningún lugar al que ir…

—Claro, Thiel. No estás aprendiendo esto por ninguna razón en particular, ¿verdad? Solo quieres parecerte a tus maravillosos hermanos, ¿no es así?

Con la mano de Ferdian aún cubriéndole la boca, Thiel movió los ojos, mirando sucesivamente a Ferdian, Rudian y Olivier.

Ferdian y Rudian la miraban con una sonrisa.

¿Será que temen que la hermana Olivier quiera acompañarme…?

La niña captó la indirecta y, con la mano de Ferdian cubriéndole la boca, asintió ligeramente.

—……

—¿Ves? Ja, ja, mi hermana….

Solo entonces Ferdian la dejó ir.

Olivier, que había estado observando todo, entrecerró los ojos y se volvió hacia Ferdian y Rudian.

—Díganme.

—¿Qué?

—Díganme qué están escondiendo. ¿A dónde va a ir Thiel? ¿Por qué no me lo dijeron? ¿Qué es lo que ocultan?

Ferdian y Rudian se encogieron de hombros, soltando una risa burlona. Al ver que no podía obtener ninguna respuesta de ellos, Olivier cambió su enfoque.

—¡Thiel!

—… Yo… no lo sé…

Sin embargo, Thiel, sin ganas de contrariar a Ferdian y Rudian, giró la cabeza en silencio.

Olivier, con una expresión de traición, abrió la boca con sorpresa.

—¿Cómo…?

—……

—¿Cómo pueden hacerme esto…?

Fue entonces cuando…

—Olivier.

Desde la distancia, Alpheus se acercaba llamando a Olivier. Ante la voz de su abuelo, Olivier levantó la cabeza de golpe y sonrió radiantemente.

—¡Abuelo!

—Sí, qué bien que estés aquí. Tengo algo que decirte, entra.

Al escuchar las palabras de Alpheus, los rostros de los dos hermanos se oscurecieron de inmediato, mientras que el rostro de Olivier brillaba como la luz del sol de la mañana.

En ese momento, sus emociones contrastaban claramente.