⋆˚ʚɞ Traducción / Corrección: Nue
—¿Por qué?
—Porque estoy satisfecha con mi vida actual. Quiero vivir tranquila, sin grandes problemas. Por eso vine, para que no te preocupes si alguien me está buscando.
—……
Aunque su tono era suave, el mensaje era claro: no quería que se preocupara más por ella.
Kiran, incapaz de responder con un simple ‘sí’, miró a Siana con el rostro triste.
Siana rechazó firmemente la oferta de Kiran de acompañarlo y se marchó del hotel.
Caroline, viendo a Kiran cabizbajo, lo empujó con el pie.
—¿Por qué estás tan deprimido?
—……
—La princesa dijo que no quiere ir contigo. Incluso rechazó tu oferta de ayudarla económicamente.
Siana había rechazado completamente todas las ofertas de ayuda de Kiran.
Por eso Caroline se sentía aliviada.
Me preocupaba que hubiera venido a aprovecharse de Kiran, pero por suerte no es así.
Aunque Caroline no tenía nada en contra de Siana, no veía ningún beneficio en hacerse cargo de la princesa de un reino caído.
Sin embargo, parecía que Kiran tenía una opinión completamente diferente.
Kiran habló con seriedad.
—Es extraño.
—¿Qué cosa?
—Vino hasta aquí solo para decirme que no me preocupara más por ella.
—……
—Y además, no me dijo dónde está viviendo ahora, como si estuviera en un lugar que no debería ser revelado.
Había más de un detalle sospechoso, como señalaba Kiran.
Sin embargo, Caroline no quería involucrarse más con Siana y frunció el ceño.
—Entonces, ¿qué piensas hacer?
—Tengo que investigar más sobre la princesa. Estoy seguro de que hay algo que no me está diciendo.
En ese momento, Caroline sintió un fuerte impulso de golpear a su hermano en la cabeza con el tacón de su zapato.
⊱ ──────ஓ๑♡๑ஓ ────── ⊰
—…. Otra vez.
Rashid, recostado en un largo sillón, murmuró en voz baja.
Rashid se llevó una mano al pecho.
Thump, thump, thump.
Su corazón latía con fuerza.
Rashid miró a Chuchu (el hurón blanco) y Nyamnyam (la ardilla) que se movían sobre su cuerpo, y murmuró.
—Es extraño, ¿verdad? Siempre he sido muy fuerte, casi nunca me he enfermado…
Los días en los que su corazón latía con fuerza se habían vuelto más frecuentes.
Desde el banquete de la rosa.
Más precisamente, desde el momento en que Siana le sonrió bajo la luz de la luna.
En ese momento, la belleza de Siana dejó a todos absortos. Tal vez por eso mi corazón late así.
Sentir excitación al ver algo hermoso es una reacción natural del ser humano.
¿Podría ser solo eso?
Rashid no estaba seguro de sus sentimientos y se sentía confundido.
En ese momento, su caballero guardián, Sol, se le acercó.
—Su Alteza, ha llegado un visitante.
Rashid abrió los ojos con sorpresa.
Mucha gente había visitado a Rashid, que estaba actuando como el Emperador en funciones, pero siempre enviaban una carta para reservar la visita con días de antelación.
Las visitas inesperadas, como esta, solo ocurrían en el ámbito de las relaciones personales.
Y casi nadie tenía una relación tan personal con Rashid como para visitarlo de esta manera.
Sol continuó hablando.
—Es alguien llamado Kiran del Gremio comercial Mystic. Dice que quiere hablar sobre la persona que fue su pareja en el banquete de la rosa.
—¡…!
En ese momento, Rashid recordó a un joven.
Un chico con un llamativo cabello naranja y una mandíbula afilada.
La noche del banquete de la rosa, el joven miraba fijamente a Siana.
Fue una mirada extremadamente desagradable.
De repente, una pequeña idea cruzó la mente de Rashid.
Un joven que se enamoró de una desconocida en el banquete adornado de rosas.
Después del banquete, el joven intentó buscarla, pero no pudo averiguar nada sobre ella.
Desesperado, decidió buscar al príncipe heredero, que había sido el compañero de la mujer, con la esperanza de saber algo sobre ella.
Si se trata de eso…
Rashid bajó la mirada.
Tendré que culparlo por intentar conquistar a la mujer del príncipe heredero y cortarle los ojos. Así no podrá volver a mirar a Siana de esa manera.
Una sonrisa escalofriante se formó en el rostro de Rashid.
Sol, al ver esa expresión, habló apresuradamente.
—¡Su Alteza! Este no es un campo de batalla, es el pacífico palacio imperial. Además, Kiran es el hijo del jefe del Gremio Mystic, un grupo que el Emperador aprecia. Así que no debe matarlo.
—No te preocupes. No lo mataré.
¿No lo matará?
Al entender el matiz en las palabras de Rashid, Sol puso cara de preocupación.
—Tampoco debe hacerle ningún daño. Es un ciudadano respetable.
—Lo tendré en cuenta. Ahora tráelo aquí.
Sol, mirando a Rashid, que no parecía tener ninguna intención de ser cuidadoso, asintió con preocupación.
Rezando para que no ocurriera nada grave.
Poco después, Kiran apareció en la sala de audiencias del Emperador.
Con su llamativo cabello naranja, sus ojos ligeramente rasgados como los de un gato, y sus brillantes ojos dorados, Kiran tenía un rostro tan llamativo que era difícil creer que fuera solo el hijo de un comerciante.
Rashid lo observó con desdén.
A pesar de todo, sigue siendo solo un niño inmaduro.
Después de una evaluación fría, Rashid preguntó con una expresión impasible:
—Entonces, ¿quieres hablar sobre la mujer que fue mi pareja en el banquete de la rosa?
Estaba preparado para castigar severamente a Kiran si mostraba alguna intención impura hacia Siana, la mujer del príncipe heredero.
Sin embargo, lo que Kiran dijo fue completamente diferente de lo que Rashid esperaba.
—La dama que estaba a su lado ese día, ¿es la princesa Siana del Reino de Asilond?
—¡……!
Kiran continuó con una mirada penetrante mientras Rashid lo miraba sorprendido.
—No niegue ni diga que no lo sabe. Ya he hecho toda la investigación.
Después de que Siana se fue, Kiran comenzó a investigar. Lo primero que quiso descubrir fue dónde estaba residiendo Siana. Sin embargo, por más que buscó en todos los rincones de la capital, no pudo encontrar ningún rastro de ella.
Desesperado, Kiran amplió su búsqueda hasta el palacio imperial. Aunque la seguridad del palacio era extremadamente estricta, logró encontrar una pista.
Siana estaba en el palacio imperial del imperio que había destruido su reino. Y no como una invitada, sino como una simple sirvienta.
Era una historia imposible de entender. Kiran se obsesionó aún más con descubrir la verdad detrás de esta situación absurda.
Kiran miró a Rashid y dijo:
—El día que el Reino de Asilond fue aplastado por el ejército imperial, la princesa desapareció. Después, cuando el príncipe heredero regresó al palacio imperial, la princesa se convirtió en una sirvienta. ¿Coincidencia? No lo creo.
No pensaba que esto fuera una simple coincidencia. Aunque el palacio imperial no tenía criterios tan estrictos para seleccionar sirvientas, era impensable que eligieran a la princesa de un reino que ellos mismos habían destruido recientemente. Y mucho menos de manera tan secreta.
Kiran continuó con su mirada desafiante:
—¿Es cierto que usted convirtió a la princesa Siana en una sirvienta del palacio?
—… ¿Y si así fuera?
—¡…!
Kiran se sintió aún más enfurecido al ver la expresión tranquila de Rashid.
¡Qué descaro, convertir a una princesa en una sirvienta después de destruir su reino!
Aunque no había encontrado pruebas concretas, estaba seguro de que la mujer que Rashid llevó como su pareja al banquete de la rosa también era Siana.
Después de descubrir todo esto, Kiran no pudo contenerse y corrió al palacio imperial.
Por supuesto, sabía que el hombre frente a él tenía el temible apodo de ‘Príncipe de Sangre’. También sabía que era el heredero más cercano al trono del imperio que controlaba la mitad del continente.
Aun así, Kiran tenía que decir lo que pensaba.
—Príncipe heredero, no importa cuán grandioso sea, no está bien arrastrar a alguien y obligarla a servir como una esclava. Eso es algo que solo el peor de los villanos haría.
Si su hermana Caroline hubiera estado presente, habría gritado: ‘¡¿Quieres morir?! ante esas palabras.
Sin embargo, Rashid no decapitó a Kiran ni le cortó la lengua por hablar de forma tan atrevida.
En cambio, respondió con una voz calmada:
—Estás muy equivocado. Nunca forzé a Siana a venir aquí. Ella deseaba convertirse en una sirvienta del palacio, y yo solo cumplí su deseo.
Normalmente, cuando se encontraba en una situación como esta, Rashid ignoraba a la persona que lo molestaba, la echaba o la mataba. Esta era la primera vez que se tomaba la molestia de dar una explicación.
Después de un momento, Rashid se dio cuenta de por qué estaba diciendo algo tan estúpido.
—No he hecho nada malo a Siana.
Eso era lo que realmente quería decir.
Pero Kiran no se lo iba a creer tan fácilmente. Con una expresión de incredulidad, Kiran respondió:
—¿Quién en su sano juicio pediría algo así al hombre que destruyó su reino y mató a su familia?
—…….
—La princesa solo dijo lo que tenía que decir para sobrevivir. No quería morir a manos del asesino que tenía su vida en sus manos.
—¡…!
Kiran no pasó por alto el leve temblor en los ojos violetas de Rashid.
Con una mirada aún más desafiante, Kiran continuó:
—Si necesitas una sirvienta inteligente para cualquier tarea, el grupo Mystic puede proporcionarte una. Y si necesitas pagar un rescate por la princesa, estamos dispuestos a hacerlo. Así que… —Kiran hizo una pausa y miró a Rashid intensamente antes de continuar—: Libera a la princesa Siana de este lugar horrible. Ella no merece sufrir en el palacio de su enemigo.
N/Nue: No estoy en contra de que Rashid ya sepa que gusta de Siana pero NO ASÍ. Lo mejor fue que esa gente muriera, y si no sabes, NO HABLES.
El hermoso rostro de Rashid se congeló como el hielo.
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