⋆˚ʚɞ Traducción: / Corrección: Nue
¡Oh no!
Debería haber dicho solo ‘tío’.
Tal vez fue porque me había estado repitiendo la palabra ‘papá’ desde hace un rato.
Los niños no paraban de preguntar quién era mi papá, quién era mi mamá.
Quizás yo también quería llamarlo así, aunque fuera una vez.
Mi tío sonrió ligeramente y me dio una palmadita en la mejilla.
—¿Hiciste amigos además de ese cacahuate blanco?
—Sí, ya saludé a más de diez personas. Pero, tío, creo que hay algunos rumores extraños sobre nuestra familia…
De repente, sentí una mirada intensa y giré la cabeza lentamente.
Ahí estaba Lady Bailyn, pálida.
Su dedo, que me señalaba, temblaba visiblemente.
—Ella es la hija del Duque Valiart, ¿verdad? No su verdadera hija…
—Ah, sí. Soy su so…
—¿Eso realmente importa?
—Ah, no, no me refería a eso.
Lady Bailyn sacudió la cabeza rápidamente, visiblemente nerviosa.
Mi tío, aún cargándome, se dio media vuelta y se alejó de ella con pasos decididos.
—Lo hiciste bien, cacahuate.
—¿Es algo digno de elogiar?
Lady Bailyn seguía allí, congelada como una estatua.
No es que esperara que se despidiera, pero ¿cómo pudo girarse e irse tan rápido?
Al menos mi tío no dijo nada grosero. Solo por eso, fue un éxito, aunque no parecía serlo para esa chica.
—Ya estás mostrando lo buena hija que eres. Resulta que siempre fuiste muy atenta.
Mientras decía eso, me di cuenta de que habíamos dejado atrás a Ruspe.
—¿Qué? Ay, tío, estaba con Ruspe…
¡Ah, estará esperándonos allá!
—Aika, estoy aquí.
¿Eh?
En lugar de estar donde pensé, Ruspe caminaba al lado de mi tío y de mí.
¿Cuándo llegó?
—Ruspe, ¿cuándo viniste?
Ruspe me miró.
—Te seguí cuando empezaste a correr.
—Pensé que seguías allá. Tío, bájame. Quiero ir con Ruspe.
Salté de los brazos de mi tío.
—Lo siento.
—No pasa nada.
Lady Bailyn, que se había quedado atrás, todavía estaba petrificada.
Poco después, se dio la vuelta y desapareció hacia el lado opuesto.
Nuestro plan de ir a tomar algo frío se interrumpió, pues de repente escuchamos una voz que anunciaba la llegada del Emperador.
La gente, que estaba disfrutando de la fiesta en pequeños grupos, comenzó a inclinarse y saludar en una dirección.
—Saludamos al sol del imperio.
A lo lejos, vi al Emperador aparecer con su uniforme.
—Saludamos al sol del imperio.
Aunque mi saludo no le llegaría, hice una pequeña reverencia tal como me enseñó la Baronesa Remonica, sosteniendo los lados de mi vestido y doblando ligeramente las rodillas.
—Lo hice bien, ¿verdad?
—Sí, ¿y yo?
—Tú también lo hiciste perfecto.
Nos susurramos suavemente mientras manteníamos nuestras cabezas inclinadas.
—Gracias por acompañarme en esta memorable fiesta. Por favor, disfruten libremente.
Tras las breves palabras del Emperador, el ambiente relajado de la fiesta volvió.
El Emperador estaba en la distancia, rodeado por nobles que seguían presentándole sus respetos.
Ruspe y yo comenzamos a regresar al grupo de niños.
Aunque estaba con ellos, seguía prestando atención a las conversaciones de los adultos.
Todas las voces me resultaban desconocidas, salvo las de algunas personas que ya conocía.
Me daba curiosidad el otro lado del salón, donde nunca había estado.
Podría simplemente caminar hasta allí, pero esa zona estaba llena de adultos, sin ningún niño.
No me había dado cuenta hasta ahora, pero mi tío estaba rondando cerca todo el tiempo.
Si decidía ir allí de repente, probablemente me cargaría como un saco y me devolvería.
Debe pensar que soy una pequeña revoltosa.
—Aika, ¿viste esto?
—¿Eh?
—Es algo que Luis trajo.
Refi me tomó del brazo y me guió.
Los amigos que antes hablaban de manera formal ahora usaban un lenguaje más informal.
En las lecciones de etiqueta, nunca nos enseñaron que debíamos hablar formalmente entre amigos, así que siempre pensé que hablar de forma casual era lo normal.
Pero hoy, algunos niños me llamaban ‘señorita’ de repente mientras hablaban conmigo.
—¿Qué es esto?
—Es un artefacto mágico. Mi papá me lo dio como regalo de cumpleaños.
Lo que Luis sostenía parecía una especie de brazalete con un botón en el centro.
Al presionarlo, empezó a sonar una melodía de caja de música y apareció una pequeña imagen en el aire.
Era una mariposa moviendo sus alas.
—¡Guau!
—¡Guau! ¿El papá de Luis te regaló esto? ¡Qué increíble!
—¡Yo también le pediré uno!
Todos los niños estaban fascinados por el artefacto en la muñeca de Luis.
A mí también me pareció impresionante.
En el aire, una mariposa azul revoloteaba como si fuera real.
—¿Tú también tienes uno de estos, señorita?
—¿Eh?
—¿El Duque Valiar te dio algo así?
Nunca había recibido un artefacto mágico.
Negué con la cabeza.
Entonces todos hicieron un sonido de sorpresa.
—¿No tienes un artefacto mágico? Pensé que seguro tendrías uno.
¿Por qué siento que debería decir que he recibido algo…?
Pensé por un momento y recordé lo último que me habían dado.
—No, nunca había visto algo así. Nunca me han dado algo como esto, solo me regalaron una academia…
N/Nue: Bien humilde ese regalo… JAJAJAJA.
Es un regalo, así que no importa, ¿no?
—¿A-A-Academia?
—¿Qué es eso?
Todos empezaron a murmurar.
—¿No es una academia ese lugar donde los hermanos mayores van con ropa elegante? Mi hermano también entró en la Academia Miers este año.
Al escuchar esto, todos quedaron más asombrados.
—¿Cómo te pueden regalar eso?
—¿No es un edificio?
—Es enorme.
—No lo sé, solo sé que mi abuelo dijo que la construiría para mí. Hace poco coloqué el primer ladrillo allí.
—Wow… La señorita recibe una academia como regalo.
De repente, Luis se quedó en silencio.
Parecía un poco abatido, así que rápidamente señalé su muñeca.
—Creo que esto es realmente increíble y genial. Parece que la mariposa está viva.
—¿De verdad…?
Luis me preguntó con incertidumbre.
Asentí enérgicamente.
—Sí, creo que es muy bonito y sorprendente.
—Aika.
Ruspe me llamó.
—¿Eh?
—Tú también tienes uno.
—¿Eh? ¿Qué cosa?
—Tú también tienes un artefacto mágico.
¿Yo tengo un artefacto mágico?
—No, Ruspe, yo no tengo ninguno. Nunca me han dado un artefacto mágico.
—Un momento, ¿puedo tocarte?
—¿A mí?
—Sí.
—Sí, está bien.
Entonces, Ruspe extendió su mano hacia mí.
Fue directo al broche que él mismo me había regalado.
—¿Por qué…?
Me quedé quieta mientras lo inspeccionaba.
Ruspe presionó la parte inferior de la gema.
Pude escuchar un pequeño clic.
Y entonces sucedió.
De repente, el broche empezó a emitir un sonido crepitante, y una luz brillante se elevó hacia el cielo.
—¿Luz…?
Encima de mi cabeza, una explosión de luz brilló como fuegos artificiales.
Entonces, pequeñas motas de luz dorada comenzaron a caer suavemente a mi alrededor.
Las chispas doradas, cayendo sobre mi vestido oscuro como el cielo nocturno, parecían fundirse con la tela.
—¡Wooooow!
—¡Miren a la señorita!
—¡Es realmente hermoso!
Los niños comenzaron a gritar emocionados.
—¿Esto era… un artefacto mágico?
¿No era solo un broche de joya?
—Me olvidé de mencionarlo cuando te lo regalé.
Ruspe sonrió tímidamente.
Los niños se agruparon a mi alrededor, tratando de atrapar la luz que caía lentamente.
Aunque Luis volvió a ponerse un poco triste, me dijo que mi artefacto mágico también era realmente increíble.
Estuve rodeada por ellos durante un buen rato.
Algunos me preguntaron si podían presionar el broche, mientras otros querían saber dónde lo conseguí.
—Me lo regaló mi amigo Ruspe. ¿Verdad, Ruspe?
Esta vez, todas las miradas se dirigieron a él.
Las preguntas que antes me hacían a mí, ahora se las lanzaron a él.
—No lo compré, llevé una piedra mágica a un joyero de nuestra familia y lo mandé hacer. No se puede conseguir.
—Entonces, ¿solo la señorita tiene uno?
—Qué envidia.
—Yo también quiero uno…
—La señorita tiene mucha suerte.
No era mi intención, pero me sentí un poco orgullosa y levanté los hombros.
Cuando los niños se alejaron un poco, agarré la mano de Ruspe y le susurré:
—Gracias, Ruspe. Pensé que solo era un broche y que bastaba con llevarlo. Es realmente bonito. Se lo mostraré a Zenda más tarde. ¡También me puse la pulsera! ¿La viste?
—Sí, la vi cuando levantaste la mano. Yo también traje la mía.
Ruspe sacó un pañuelo de su bolsillo interior.
Parece que mi amigo más cercano es Ruspe.
¿Él también pensará lo mismo?
Nos sonreímos mutuamente.
Aún queda mucho por hacer, pero creo que mi primer baile ha sido todo un éxito.
Comments for chapter "Capítulo 87"
MANGA DISCUSSION